Cómo funciona la prestación por incapacidad temporal del INSS

Artículo sobre Seguros de baja laboral publicado por Doiser

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¿Qué requisitos son necesarios para poder solicitar la baja laboral? ¿Cuál es la cuantía de la prestación? ¿Qué día paga el INSS? Estas son algunas de las principales preguntas que surgen a la hora de enfrentar este tipo de situaciones.

En este artículo veremos en detalle los aspectos más importantes de las bajas laborales y daremos respuesta a las dudas más habituales sobre el tema. ¡Vamos allá!

¿Qué es una baja laboral?

Se trata de aquella situación en la que se encuentran los trabajadores que no pueden trabajar debido a una enfermedad común o un accidente laboral. Para que se considere baja laboral, debemos contar con la asistencia de la Seguridad Social, que será la encargada de determinar la baja y la cantidad de días que debemos estar sin acudir al trabajo.

¿Cuáles son las causas más comunes de una baja laboral?

Enfermedad común o profesional.
Accidente ocurrido dentro o fuera del lugar de trabajo.
Observación de enfermedades que precisen de una baja médica.

¿Qué requisitos son necesarios para poder solicitar una baja?

Ser afiliado y estar dado de alta en la Seguridad Social o en una situación similar a la de alta.
Tener un periodo mínimo de cotización de 180 días en los cinco años anteriores a la baja en caso de enfermedad común.
Análisis del coeficiente de parcialidad y global en caso de ser trabajadores con contrato a tiempo parcial.
No se necesita tiempo previo de cotización por enfermedad profesional o accidentes, ya sean laborales o no.

El subsidio

Debemos resaltar que no todos los subsidios tienen la misma duración puesto que es algo que tiene que ver con el tiempo que ha trabajado cada persona, así como con la duración de la baja. Por este motivo, existen fórmulas para calcular la cuantía, pero no es algo que pueda establecerse como una cantidad fija.

¿Cuánto es el subsidio? Esta prestación económica se calcula de acuerdo con la base reguladora y el tipo de incapacidad, la cual se abonará durante el tiempo en el que la persona esté de baja. Esta cantidad difiere si es enfermedad común o accidente no laboral (60 % de la base reguladora entre el 4º y el 21º día y el 75 % a partir de entonces) o enfermedad profesional y accidente laboral (75 % de la base reguladora a partir del día siguiente de la baja).
¿Cómo se calcula la base reguladora? Deben tenerse en cuenta el origen de la incapacidad y el tipo de contrato que tenga cada persona, así como los años cotizados e incluso si la compañía dispone de un seguro médico privado.
¿Quién debe pagar esta prestación? El reconocimiento de este derecho corresponde a la Seguridad Social o a la Mutua colaboradora, de acuerdo con las condiciones que tenga el empresario para la cobertura de esta contingencia. Además, el abono de dicha prestación se efectuará con la misma periodicidad que los salarios. En el caso de enfermedad común o accidente no laboral, es el empresario el que debe hacer el pago, desde el cuarto día al decimoquinto día de baja.
¿Cuánto dura el subsidio? La duración de esta prestación se establece de acuerdo con el tiempo de baja médica, por lo que es algo que no depende de la valoración de las autoridades médicas, que serán las que decidan cuándo darnos de alta para volver a trabajar. Entonces la prestación finaliza y volvemos a estar en el régimen de alta de trabajadores.
¿Puede extinguirse este derecho? Hay varias causas por las que se termina esta prestación, como el agotamiento del plazo máximo de 545 días de baja médica, así como recibir el alta para volver a trabajar. Otros motivos son el reconocimiento de la pensión por haber llegado a la edad de jubilación, por iniciarse un expediente por incapacidad permanente o por fallecimiento.

¿Puede perderse o quedar suspendido su derecho?

Este derecho puede ser denegado, anulado o suspendido siempre y cuando el beneficiario haya actuado de manera fraudulenta para lograr dicha prestación, así como si el beneficiario trabaja por cuenta propia o ajena durante la baja. Igualmente, las personas con este derecho deben aceptar el tratamiento en cuestión puesto que el rechazo o la incomparecencia ante las convocatorias de los médicos son motivos suficientes para suspender la prestación.

¿Cómo se gestiona la documentación de la prestación por incapacidad temporal?

Este aspecto normalmente queda en manos de las empresas, aunque los trabajadores tienen que estar siempre a disposición de los organismos para hacerse las revisiones correspondientes. Para comenzar, debemos presentar un parte médico emitido por el facultativo, el cual es el desencadenante a nivel legal para comenzar a tramitar la prestación.

Normalmente, las empresas cuentan con asesorías o gestorías, las cuales son las encargadas de tramitar dicha documentación ante la Seguridad Social. Por tanto, los empleados deben llevar el papel de la baja y el del alta y únicamente estar disponible para ir a las revisiones médicas, quedando pendiente de cobrar el subsidio en los plazos indicados.

¿Cómo se controlan las bajas?

Cuando un trabajador está de baja, tiene que estar disponible para ser evaluado tanto por los organismos públicos como por los trabajadores de la mutua de la empresa, que serán las que determinen si dicho empleado puede incorporarse a trabajar. Para ello, se emiten informes médicos para determinar el final de la baja o la renovación hasta la total recuperación.

La importancia de los seguros de baja laboral

Una vez analizados los principales conceptos sobre el subsidio por incapacidad temporal queda patente que, en el caso de los autónomos, la cuantía que garantiza el INSS es por lo general insuficiente para cubrir las pérdidas diarias a las que debe enfrentarse un profesional mientras no puede retomar su trabajo.

Dado que las enfermedades de larga duración y los accidentes graves no pueden preverse, y con el objetivo de complementar la prestación estatal, es más que habitual que los autónomos contraten un seguro de baja laboral que les ofrezca el extra necesario para poder tomarse el tiempo que precisan para recuperarse completamente de sus dolencias.

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